013 Iglesia y Convento de S. Francisco

13-CONVENTO DE SAN FRANCISCO

Corría el año de 1488, el siguiente después a la toma cristiana de la Ciudad, cuando la Orden de los Franciscanos envió a Vélez-Málaga a un fraile con intención de fundar un convento, pero no es hasta diez años después cuando los Reyes Católicos ceden a esta Orden la Iglesia de Santiago, que estaba levantada sobre una antigua mezquita.

La dedicación de la Orden a la enseñanza será uno de los factores que determinarán la gran influencia que tuvo esta congregación religiosa en la historia veleña. No obstante, eso no impidió que, a consecuencia de la Desamortización de Mendizábal, en 1836, los franciscanos tuvieran que salir de este convento y el monasterio perdió, además, uno de su claustros sobre el que se edificó el Mercado Municipal de Abastos. No será hasta después de la Guerra Civil Española cuando los frailes de la Orden de San Francisco volvan de nuevo. Sin embargo, la Iglesia de Santiago siguió abierta al culto y parte del monasterio continúo siendo un centro docente.

Si nos fijamos en su original fachada vemos que es una hermosa hornacina de proporciones monumentales y que está flanqueada por enormes pilastras y un frontón superior. En los dos laterales observamos grandes marcos terminados en volutas. La puerta del templo está dentro de un arco de medio punto, y encima vemos un hermoso balcón cóncavo y también observamos una pequeña hornacina, fechada en 1778, en la que hay una imagen del patrón fundador de la Orden, San Francisco de Asís. También destaca de la fachada, una torre rectangular con tejado a cuatro aguas. Hay que señalar que la sección inferior de esta hermosa torre pertenece al alminar de la antigua mezquita andalusí que se alzaba en este solar.

Además de su portada, de este conjunto arquitectónico podemos destacar, entre otros aspectos, el claustro y la iglesia.

El claustro es de estilo renacentista-mudéjar, con un patio cuadrado con cinco arcos por cada lado. En la planta inferior, arcos de medio punto enmarcados por alfices se sostienen sobre columnas de forma octogonal fabricadas en ladrillo. En el corredor de la planta superior vemos hermosas columnas de Orden Toscano. En uno de los laterales, una portada de estilo barroco nos lleva a unas escaleras de columnas también de Orden Toscano.

En cuanto al propio templo en sí, decir que inicialmente, la iglesia tenía una sola nave. Sin embargo, distintas ampliaciones a lo largo de su historia la han complementado con la nave del Evangelio, el coro alto y la Capilla del Buen Pastor. Por tanto, en la actualidad, este templo tiene la originalidad de contar con dos naves, en lugar de lo más habitual que son tres naves o una única nave.

La nave del evangelio, de cuatro metros y medio de anchura, cuenta con diversas capillas y una falsa cúpula. En la pared opuesta, en el lado derecho según entramos al templo, y lindante con el claustro, vemos el lateral diestro de la nave central y allí está la capilla de María Santísima de la Caridad, antaño capilla del Sagrario.

La nave de mayor anchura, que podemos denominar nave central, está cubierta con bóveda de medio cañón con lunetos. Arriba del presbiterio vemos una cúpula barroca de media naranja sobre pechinas, y en su frontal observamos el nuevo retablo, en el que destacan las pinturas del genial artista de la Escuela Veleña Francisco Hernández. A los pies de la nave principal, arriba, está el magnífico coro, con su hermosa decoración en la que no faltan medallones, ménsulas, etc.

Bajo el coro, hay un oleo religioso, del siglo XVII, del "Ecce Homo" del siglo XVII. Dentro del templo, vemos también la Capilla del Buen Pastor, construida en el siglo XVIII con el patronazgo de D. Juan Antonio Palomino y Vargas, millonario comerciante veleño de la época. Según dicen, este exportador de pasas estaba muy preocupado por la salvación de su alma y fue el fundador del Patronato del Buen Pastor. Por su aspecto, la Capilla del Buen Pastor, podría parecer una iglesia independiente. Tiene su propio presbiterio, nave y tribuna, y está decorada con una exuberante decoración con yeserías. También es destacable del interior del templo la capilla de Jesús el Pobre, cubierta con bóveda de ocho paños y de extraordinaria decoración barroca. En cuanto a las muestras del arte de la imaginería, hallamos en San Francisco varias obras de Domingo Sánchez

Mesa, fechadas a mediados del pasado siglo XX, como las tallas de Jesús de la Humildad y Jesús el Pobre, y también un San Francisco de Asís. Hay que decir que esta iglesia perdió buena parte de sus numerosos tesoros artísticos durante la Guerra Civil. La Iglesia de Santiago, conocida como San Francisco, es la sede canónica de diferentes cofradías de la Semana Santa veleña.

Por lo que esta iglesia alberga las imágenes de los Sagrados Titulares de las cofradías de Nuestra Padre Jesús Orando en el Huerto y María Santísima de los Desamparados, de Nuestro Padre Jesús de la Humildad y María Santísima de la Paz, de Nuestro Padre Jesús Nazareno "El Pobre" y María Santísima de la Esperanza, del Santísimo Cristo del Amor en su Sagrado Descendimiento y María Santísima de la Caridad y de Nuestra Señora de la Soledad y San José del Carmen (esta última antiguamente vinculado al desaparecido convento del Carmen). Tras esta interesante visita a este templo, muestra de la religiosidad profundamente cristiana que ha marcado la historia moderna y contemporánea de Vélez-Málaga, vamos a ver ahora un ejemplo de su pasado musulmán: El mihrab situado próximo al palacio de Beniel, a la entrada de la calle de la Gloria. 

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