Lagos

Lagos es el núcleo costero más oriental de Vélez-Málaga, una localidad singular que se presenta como la puerta de la Axarquía, justo en la frontera natural que el río Güi marca con El Morche (Torrox).

Su ubicación ligeramente apartada de la unidad territorial de su municipio matriz se debe a una particularidad histórica del siglo XIX, no se constituyó como municipio independiente durante el Trienio Liberal porque no alcanzó el censo de 1.000 habitantes requerido. Aunque sus raices se hunden en el tiempo, formando parte del antiguo territorio de Bentomiz (Taha de Bentomiz) tras la consquista de 1487, hasta 1501 que pasó a depender del territorio de Vélez-Málaga.. La rica historia de Lagos se materializa en la Torre Vigía de Lagos, una robusta construcción troncocónica del siglo XVII levantada con mampostería de piedra del terreno. Esta torre defensiva con una altura de casi 10 metros, preside la costa ofreciendo vistas panorámicas, siendo un mudo testigo de los asedios marítimos pasados. Bajo sus pies, la zona esconde importantes hallazgos arqueológicos, no solo en los cercanos yacimientos de Las Chorreras, sino en el propio Cerro de la Molineta, donde se han descubierto tumbas de incineración de la élite fenicia del siglo VIII a.C., con ajuares que incluían urnas de alabastro egipcio, confirmando la antigüedad y relevancia social del asentamiento.

Visitar Lagos es adentrarse en un auténtico pueblo de pescadores que ha sabido conservar su encanto original, ofreciendo al visitante una panorámica costera inolvidable, con una vista que en ciertos puntos asemeja a una cala tranquila. Su litoral se extiende a lo largo de la playa de Pijil-Lagos, un tramo semiurbano de más de un kilómetro de longitud, caracterizado por su grava y oleaje moderado. A pesar de su atmósfera relajada y semiurbana, cuenta con servicios esenciales, chiringuitos, vigilancia y es reconocido como un excelente enclave para la pesca.

La vida social es vibrante y festiva, la Feria de Lagos se celebra la primera semana de agosto,. Además, la costa se convierte en escenario de celebraciones paganas y tradicionales, como la noche de San Juan con moragas y la quema de muñecos, y en septiembre la Noche de las Candelarias.

La economía de Lagos se basa en la sinergia entre el turismo de sol y playa y la agricultura subtropical.