006 Retablo de Santa María

6. EL RETABLO DE SANTA MARÍA

Este hermoso conjunto es una de las obras de arte de la arquitectura lignaria del siglo XVI más significativas e interesantes del patrimonio de la provincia de Málaga, destacando por su excelente calidad técnica y artística. Se estructura en una parte inferior, la denominada predela o banco horizontal que es el basamento del retablo, la parte que más próxima al suelo; y en tres cuerpos, o pisos horizontales centrales y, por encima de todo el conjunto, el ático, en la parte superior central.

Todo este magnífico conjunto escultórico tiene unas dimensiones totales de 10 metros de altura y 6, 60 metros de ancho, donde la ornamentación arquitectónica (frontones, columnas estriadas, etc.) delimita y estructura el espacio, con tres pisos horizontales o cuerpos sobre el banco o predela y en tres calles verticales, flanqueadas las laterales por columnas separadas con dobles hornacinas en los intercolumnios, donde se irán colocando todas las imágenes escultóricas, para facilitar el relato iconográfico y catequético del conjunto.

Técnicamente, el retablo es de madera de pino y está revestido de pan de oro, con abundante decoración tallada, en su mayoría policromada y estofada. Su ejecución se la debemos a Pedro de Moros, presentando grandes similitudes con el Hospital de San Andrés de Coín.

El veleño Don Juan Zapata, obispo en tierras de la América Española, financió las obras del retablo, aunque quedó sin policromar hasta principios del siglo XVII, cuando el que llegara a ser obispo de Guadix, León y Málaga, don Juan Alonso de Moscoso, asumió los costes.

El programa iconográfico se sustenta en las figuras de la Virgen María y Jesucristo, a los que se les dedican las partes principales del retablo: el banco y la calle central. Recordemos que la palabra calle, en los retablos, define cada una de las divisiones verticales de las que consta.

Hay una lectura secuencial de los acontecimientos marianos que comienza, en la parte inferior, en la predela, con los relieves de la Visitación de la Virgen María a su prima Santa Isabel, la Anunciación de San Juan Bautista, concluyendo con los relieves del nacimiento de Jesús y la Presentación en el templo. El relato continúa en la calle central con el Anuncio del Arcángel San Gabriel a María de la Encarnación del Hijo de Dios, advocación a la que, recordemos, está dedicada esta iglesia, y sigue con la escena de la Asunción de la Virgen y del Calvario con la presencia de San Juan Evangelista y de la Madre de Dios.

El retablo fue mutilado en 1936, durante los acontecimientos de la Guerra Civil Española, y posteriormente fue trasladado al altar mayor de la parroquia veleña de San Juan Bautista.

En el año 2009 fue restaurado por la empresa especializada Crest Arte, de Sevilla. En la actualidad, se conserva un importante grupo de imágenes primitivas, originales y de la misma época del retablo; pero desgraciadamente también faltan otras muchas de las que conformaban el conjunto original.

Para suplir los vacíos de las hornacinas, se fueron incorporando imágenes de diferentes santos y santas, como es el caso de las de San Juan Bautista, en el tercer piso o cuerpo horizontal, a la derecha, y Santa Justa, en el segundo piso, a la izquierda, junto a la imagen de una torre, y Rufina, en el segundo cuerpo también, pero a la derecha.

El conjunto escultórico original se halla disperso en el retablo. Como hemos dicho en la predela tenemos relieves frontales sobre la vida de la Virgen y el Niño Jesús, que, de izquierda a derecha, son: La Visitación de María a su hermana Santa Isabel, el Nacimiento de San Juan Bautista, la Natividad y la Presentación de Jesús en el Templo, así como relieves de estilos romanista, situados en los laterales de los pedestales, si bien han desaparecido otros situados al frente y cuyos espacios están entelados en rojo.

En el primer cuerpo horizontal no se conservan las imágenes primitivas allí existentes, como la imagen de Santa María de la Encarnación que estaba situada en la calle central de ese primer piso. En el segundo cuerpo, en su hornacina central, se encuentra la imagen de la Virgen de la Asunción y sólo dos de los seis angelitos que originalmente la acompañaban. En el tercer cuerpo hallamos todas las pequeñas figuras alojadas en las hornacinas de los extremos laterales, que representan los cuatro grandes padres de la Iglesia Latina:

Así, en la calle lateral izquierda tenemos a San Gregorio Magno, encima, y a San Jerónimo de Estridón, debajo; mientras que, en la calle lateral derecha, tenemos a San Agustín de Hipona, encima, y a San Ambrosio de Milán, debajo. En ese mismo tercer piso tenemos también las esculturas originales del apóstol Santiago el Menor (a la izquierda), y el Calvario, en la hornacina central, formado por las imágenes de la Virgen, San Juan Evangelista y el Crucificado, imagen esta última, restaurada por el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, con sede en Sevilla. Una réplica de la imagen de este Cristo, el Cristo de los Vigías, es procesionada, año a año, por las calles de Vélez-Málaga, en uno de las fechas más importantes de la Semana de Pasión de esta ciudad: El Viernes Santo.

Volviendo a nuestra explicación del bello retablo de Santa María hay que insistir en que, como ya hemos dicho antes, la figura de San Juan Bautista, situada también en el tercer piso, en la calle que está a la derecha del Calvario, no formaba parte de las primitivas esculturas, sino que es de posterior incorporación.

Sin embargo, sí son originales las tallas que rematan la cornisa superior y que son, dos escudos de arcángeles, uno a cada lado, flanqueados ambos por dos niños, en los que aparece, a la derecha, el posible donante. Finalmente, en el ático se halla el alto relieve de Dios Padre, con dos figuras de niños descansando sobre el frontón.

Hay que decir que este magnífico retablo estuvo alojado, desde 1941 hasta los años ochenta, en la iglesia de San Juan, para retornar después hasta Santa María.

Una descripción gráfica y más detallada del retablo, con las figuras originales, las posteriormente incorporadas y las que faltan, pueden tenerla en el panel explicativo instalado a tal efecto.

Y tras haber podido admirar esta magnífica muestra del arte de la imaginería que es el retablo de Santa María, vamos a continuar nuestro recorrido por este hermoso templo, sede del Museo de la Semana Santa de Vélez-Málaga.

Para ello, vamos ahora hacia la Nave de la Epístola, que en Arquitectura religiosa es la que está situada en la parte lateral derecha, mirando hacia el altar. 

© Excmo. Ayuntamiento de Vélez-Málaga Plaza de las carmelitas s/n
C.P. 29700 Vélez-Málaga Tlf: 952559100